Cuando se habla de energías peligrosas se hace referencia a toda forma de energía presente en equipos, elementos o sistemas que puedan constituir riesgo contra la seguridad e integridad de las personas, equipos o instalaciones. Las energías peligrosas incluyen movimiento mecánico, energía potencial o almacenada, energía eléctrica, energía térmica o reacciones químicas. Entre las fuentes más comunes de energías peligrosas encontramos electricidad, movimiento mecánico, aire comprimido y temperatura caliente o fría.
En las empresas podemos ver exposición a energías peligrosas en las actividades de instalación, mantenimiento, servicio o reparación de máquinas y equipos, por lo cual es importante que desde la fase inicial de identificación de peligros que se hace dentro de cada organización, se realice una adecuada identificación de las actividades y tareas rutinarias y no rutinarias, para evaluar dentro de cada una de ellas los peligros presentes y la presencia o no de procesos o fases con potencial liberación de energía que pueda afectar a un trabajador o la integridad de la operación.
Una energía peligrosa puede ser descargada de forma violenta durante los procesos de mantenimiento, instalación, reparación o funcionamiento cotidiano en una máquina, equipo, proceso o sistema. NIOSH ha publicado resultados sobre las investigaciones a accidentes de trabajo realizadas como parte del Programa de Asesoría de Tasas de Mortalidad y Evaluación de Control (en inglés, Fatality Assessment and Control Evaluation – FACE) mostrando las preocupantes tasas de accidentalidad que se evidencian en la industria a causa de fallas o ausencia de procedimientos de control de energía peligrosa, en la gran mayoría de eventos con la presencia de fatalidades como consecuencia del accidente (NIOSH, 1999).
Dentro de las formas de energías encontramos:
Energía Cinética (Mecánica): Se presenta cuando hay piezas móviles de los sistemas mecánicos.
Energía Potencial: Es aquella energía almacenada, puede ser en recipientes a presión, tanques de gas, sistemas hidráulicos o neumáticos y resortes, y que puede ser liberada de forma abrupta convirtiéndose en energía cinética peligrosa.
Energía Eléctrica: Constituye la presencia de corriente eléctrica generada de fuentes estáticas o de dispositivos de almacenamiento eléctrico
Energía Térmica: Presente ante altas o bajas temperatura de trabajo mecánico, radiación, reacciones químicas o resistencia eléctrica.
Energía Neumática: Este tipo de energía utiliza el aíre comprimido como modo para generar un movimiento, la podemos ver presente en compresores, acumuladores, circuitos y otros equipos en donde existan gases comprimidos.
Fallas en el control de energías peligrosas
Dentro de los factores que más generan falla en el control de sistemas con presencia de energías peligrosas encontramos:
- Operar máquinas y equipos sin cortar por completo la electricidad, aislar, bloquear ni disipar la fuente de energía peligrosa.
- No aplicar procedimientos de bloqueo y etiquetado para permitir la identificación a través de etiquetas de los procesos de corte de energía y con seguros, para evitar su manipulación por parte de los trabajadores.
- No hacer procesos de verificación previa del corte o bloqueo de la fuente de energía peligrosa antes de comenzar el trabajo.
Medidas de prevención y protección
Es importante que las empresas dentro de sus medidas de control de peligros incluyan:
- Contar con un programa de control de energías peligrosas.
- Implementar un programa de bloqueo y etiquetado asegurando el adecuado entrenamiento a todos los trabajadores.
- Asegurar el corte de la energía, aislamiento, bloqueo y disipar todas las formas de energía peligrosa antes de comenzar el trabajo.
- Asignar a los trabajadores los dispositivos de control de energía con sus propios candados y llaves de forma individual.
- Realizar inspecciones preoperacionales antes de reactivar el equipo que estuvo en fase de reparación.
- Asegurar que todos los trabajadores se mantengan alejados de los puntos de peligro antes de reactivar la energía en el sistema.
- Implementar controles de ingeniería para optimizar el diseño de máquinas y sistemas que faciliten el control de energía peligrosa y prevengan fallas en el sistema.
- Diseño de planes de respuesta ante emergencias, los cuales deben ser probados y evaluados para asegurar su efectividad en caso de eventos reales.
- Instalar en los equipos sistemas que permitan la oportuna detección y control de sobrecargas del sistema, como válvulas de seguridad, manómetros, termómetros, sistemas de alarma de paro del proceso o de un dispositivo de venteo de los fluidos, dependiendo de la naturaleza de las energías peligrosas que se encuentren involucradas.
- Programa de inspecciones preoperacionales y periódicas que permitan detectar posibles fallas o condiciones anormales.
- Programa de mantenimiento preventivos de los equipos, instalaciones y demás elementos involucrados en el proceso donde existan energías peligrosas.
- Definir procedimientos seguros para el desarrollo de las actividades y asegurar la capacitación a los trabajadores y la supervisión sobre el cumplimiento de estos.
Fuente:
- Instituto Nacional para la Seguridad y Salud Ocupacional (NIOSH). Prevención de muertes de trabajadores por descargas no controladas de energía eléctrica, mecánica y otros tipos de energía peligrosa. DHHS (NIOSH) publicación Nº 99-110. 1999.
- Seguridad en el trabajo Edición 2011